El intendente de General San Martín, Raúl Rufeil, y el de Junín, Mario Abed, participaron de una reunión en la sede de Iscamen, ubicada en San Martín, para interiorizarse sobre los avances en la estrategia de control de la lobesia botrana, una plaga que afecta gravemente a la producción vitivinícola de Mendoza.
Durante el encuentro, se entregaron feromonas a los productores, un insumo esencial para combatir esta especie invasora que perjudica principalmente los cultivos de vid. El Gobierno provincial asumió el financiamiento de estas acciones, reemplazando el aporte que anteriormente provenía de Nación.
“El sector productivo ha sido golpeado por la lobesia, las heladas y otros factores climáticos. Pero hoy vemos un Estado provincial activo, brindando soluciones concretas”, expresó Rufeil, quien valoró el enfoque territorial de las políticas públicas que impactan directamente en la vida de las familias rurales.
La campaña abarca más de 130.000 hectáreas y alcanza a más de 9.000 productores en toda la provincia. “Hoy entregamos feromonas, la próxima semana insecticidas, y en los días siguientes se sumarán aviones y drones. Lo importante es que los productores se acerquen a sus municipios y a nuestras oficinas”, señaló Abed.
El uso combinado de herramientas biológicas y tecnológicas busca reducir el impacto de la plaga y fortalecer la competitividad del sector agrícola mendocino.