El ajuste impactará en las boletas de noviembre y estará en línea con la pauta de inflación general que se espera para el mes.
Los nuevos valores representarán un recorte parcial de los subsidios a la generación de energía que se aplican desde hace más de dos décadas y los aumentos serán en promedio del 2,5% para los usuarios finales de los servicios de electricidad y del 2,7% en el gas, en este caso para todo el país.
Los aumentos no se percibirán desde el primer día en las facturas de los usuarios, ya que en estas se reflejan los consumos de períodos vencidos.
Muchos usuarios podrían contar en las próximas facturas una combinación de las tarifas viejas y las actuales, según el período de consumo que les corresponda.
Con información de BAE