Como cada 7 de agosto, el Santuario de San Cayetano en Molino Orfila se convirtió en el epicentro espiritual de la zona este mendocina. Miles de personas se acercaron desde distintos rincones de la región para agradecer, pedir trabajo y renovar su compromiso con la fe.
La convocatoria fue organizada por la comunidad de la Parroquia Nuestra Señora del Santísimo Rosario, bajo el lema: “Junto a San Cayetano, la esperanza es semilla del trabajo”. Desde la madrugada, el santuario recibió un incesante flujo de peregrinos, en un ambiente marcado por el recogimiento, la devoción y el respeto.
🕊️ Misa Central y Procesión de Antorchas
El momento más emotivo de la jornada fue la Misa Central, presidida por el párroco Matías Brain. Al finalizar, se realizó la tradicional Procesión de Antorchas, que reunió a vecinos, familias y devotos en un acto cargado de simbolismo y espiritualidad.
La celebración incluyó un operativo especial de seguridad y control, que permitió el desarrollo ordenado de las actividades. Además, en los días previos se dictó un Curso de Manipulación de Alimentos para quienes ofrecieron productos en los puestos ubicados alrededor del santuario.
🙏 Una fecha que ya es parte de la identidad de la zona
La comunidad esteña vivió una jornada de profunda conexión espiritual y sentido colectivo, honrando al Patrono del Pan y del Trabajo en una fecha que ya forma parte del calendario religioso y cultural del departamento.
Cabe destacar que, en 2024, el Arzobispado de Mendoza elevó el Santuario de San Cayetano de Orfila a la categoría de Santuario Arquidiocesano, y confirmó al padre Brain como su rector mientras dure su misión pastoral en Junín.
Desde las primeras horas del día, el lugar se transformó en un punto de encuentro para quienes buscan consuelo, agradecen lo recibido o simplemente renuevan su esperanza.