El material fue donado por la Iglesia Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y supera los $3 millones.
Este jueves, en el Aula Magna del Hospital Perrupato, se realizó el acto oficial de entrega de materiales para el Servicio de Pediatría, a cargo de las autoridades de la iglesia y del centro asistencial cabecera de la región Este.
El acto contó con la presencia de la subsecretaria de Salud, Carina Copparoni; el director del Hospital Perrupato, José María Llaver; el Jefe del Servicio de Pediatría, Fabián Castracane, y miembros de la institución religiosa, entre ellas Susana Lacruz, responsable de toda la organización y la logística de la entrega
En total, el hospital recibió:
- 2 camas ortopédicas eléctricas para shock room y traslado intrahospitalario
- 1 Monitor multiparamétrico Contec adulto y pediátrico.
- 6 Cánulas nasales de alto flujo GGM (3 adulto y 3 infantil) de varios diámetros.
- 1 equipo de oxigenoterapia de alto flujo.
- 1 desfibrilador externo automático (DEA).
- 2 Computadoras completas Intel Core 15 16 Gb 480 SSD y monitor de 19 pulgadas.
- 1 smart TV Noblex y 1 soporte pie TV pantalla.
- 1 Practi-Man Plus – torso superior para prácticas masivas de RCP sobre adultos y niños con monitoreo electrónico inalámbrico.
- 1 Practi-Baby Plus SB maniquí pediátrico para prácticas masivas de RCP con monitoreo electrónico inalámbrico.
“Esto es un ejemplo concreto de todo lo que uno da vuelve. Agradecemos a la iglesia los materiales donados y estamos a su disposición para seguir trabajando juntos”, destacó José María Llaver, director del Hospital Perrupato.
Por su parte, el jefe del Servicio de Pediatría, Fabián Castracane, resaltó: “Agradecemos el trabajo de todo el equipo pediátrico, ya que estos materiales ya nos permitieron salvar vidas y, como pediatra, agradezco también en nombre de todos los niños que eventualmente puedan usarlo”.
Por último, Susana Lacruz, miembro de Iglesia Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, destacó una experiencia personal que involucró al hospital: “Hace poco tiempo tuve un problema de salud y en este hospital los profesionales me salvaron la vida, gracias a su compromiso y a un aparato que donó la iglesia. Esto, personalmente, me emociona porque el mismo día que donamos estos materiales, al poco tiempo ya se estaban usando”.