El caso que conmocionó a toda la provincia de Mendoza sigue su proceso de investigación, en las últimas horas se recibió nuevos resultados que darían un giro a la causa.
La investigación por los supuestos abusos sexuales cometidos por una docente de 23 años de San Martín a un alumno de 6 años está cerca de terminar y todavía no hay pruebas concretas que confirmen que esos hechos hayan ocurrido.
El niño de 6 años dio estremecedores detalles de lo que la docente le habría hecho en varias oportunidades dentro del colegio, y señaló a tres compañeros de grado también como víctimas de la maestra, por lo que el fiscal de Unidad Fiscal de Violencia de Género y Delitos Contra la integridad Sexual de San Martín, Tabaré Ezcurra, citó a los padres junto con sus hijos.
En las entrevistas que realizaron los chicos no relataron ni dejaron entre ver que hubiesen vivido alguna situación de abuso sexual por parte de su docente, como tampoco mostraron nada fuera de lo común para su edad, y no fue necesario que pasaran por la Cámara Gesell.
Con ese resultado quedó descartado en la causa que los chicos señalados por su compañero hayan sido víctimas de abusos
Además, los pesquisas habían hecho un cotejo de saliva de la docente con la encontrada en un pantalón del nene de 6 años, pero el resultado también fue negativo, por lo que hasta el momento no hay pruebas que respalden la versión dada por la presunta víctima.
Giro en la investigación
El nene ya pasó por tres instancias de Cámara Gesell en las que los especialistas indicaron que fue muy difícil que mantenga la atención y siga un mismo relato, ya que cambia las versiones de sus propios dichos.
Para los pesquisas creen que el niño estuvo expuesto a alguna situación sexual por su forma de expresarse y ampliarán la investigación para determinar qué pasó.
Tratarán de indagar en las últimas dos Cámara Gesell que restan, por lo que posiblemente ya no sea la docente el foco del presunto abuso, sino su propio entorno familiar.
La causa continúa con las declaraciones de la psicólogas y psiquiatras que trataron al chico, y también quienes asistieron a la docente desde principios de septiembre cuando comenzó la investigación.
Mientras continúa la última etapa de investigación la maestra de 23 años imputada por abuso sexual con acceso carnal y corrupción de menores, agravado por su condición de guarda, continúa con prisión domiciliaria bajo la custodia de su madre y sin tener contacto con menores de edad.
FUENTE DIARIO UNO