Cada vez son más los menores de edad que realizan diferentes tipos de apuestas en la web, buscando una ganancia económica.
Con el objetivo de esclarecer cómo «la tecnología afecta al desarrollo, relaciones y bienestar mental y financiero de los chicos», Santander Argentina, junto a la Fundación de Madres y Padres, realizaron una encuesta a los adolescentes respecto a la influencia de las apuestas online. El resultado fue alarmante: 2 de cada 10 hacen realizan apuestas deportivas o de juego en línea.
Para hacer posible la medición, los expertos consultaron a 1426 adolescentes de entre 12 y 18 años, en un periodo comprendido entre septiembre y octubre de este año.
También se destaca que, del total de los consultados, un 69% reconoció que el acceso a las billeteras virtuales habría facilitado su inicio en el mundo de las apuestas.
En ese sentido, en el informe se precisa que «el 69% de los adolescentes juega activamente online y un alarmante 17% realiza apuestas digitales con dinero, en más de la mitad de los casos 52%, sin el consentimiento de sus padres o tutores».
En cuanto al sexo de los apostadores, se reveló que los varones representan al 73% del total, contra el 23% de las mujeres que juegan en línea.
Otro de los factores alarmantes tiene que ver con la edad. Los que más apuestan tienen 17 años un 26% del total, seguidos por quienes tienen 16 y 18 años con un 22% respectivamente. Esto evidencia que los adolescentes que están a punto de terminar el secundario son más propensos a apostar en línea.
En el informe, además, se señala que un 71% respondió que pasa, al menos, 30 minutos por día en sitios de apuestas.
A pesar de que un gran porcentaje manifestó haber comenzado a apostar con sus amigos o conocidos 64%, otro 12% confesó que se vio atraído al mundo del juego luego de ver publicidad en TV, internet y juegos. Por último quedaron las redes sociales, con un 10%, y los influencers, con un 8%.
Las razones que motivan a los jóvenes a apostar tienen que ver con el deseo de experimentar nuevas sensaciones y emociones fuertes 38%, una esperanza de obtener una recompensa económica con rapidez 31% y una forma de escapar de la rutina 21%.